Dificil de contentar
Kardan cayó enfermo. Su tío le dijo :
-¿ Qué deseas comer ?
- La cabeza de dos corderos.
- No hay.
- Entonces, las dos cabezas de un cordero.
- No hay.
- Entonces no quiero nada.
Ibn Abd Rabbih, Kitabal idq el farid, tomo III
3 de julio de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
derramen sus tazas